Can Dendê no es sólo el mejor brunch en Poblenou. Es un auténtico soplo de brisa fresca y agradable en la oferta gastronómica en un barrio en creciente expansión. En una zona mayoritariamente predominante de oficinas y antiguas fábricas, Can Dendê (Ciutat de Granada 44) ha supuesto un motivo para realizar un obligado peregrinaje un fin de semana cualquiera para degustar su ya famoso brunch.
Con apenas un año de vida (abierto desde Enero de 2015), tiene mucho mérito que este local haya sabido llenar un vacío existente en un barrio más propio de bares de barrio y locales especializados en servir comida entre semana. Pero su apuesta por la calidad, el gusto por los detalles y la amabilidad de su personal han catapultado a este diminuto local a ocupar ya todas las listas de referencia con los mejores lugares para hacer un brunch en Barcelona. Todo ello dentro de un ambiente relajado e informal, lejos de cualquier atracción turística y del bullicio del centro.
De ahí que sea fácil atar cabos y, cuando uno se acerque, la estampa más habitual sea la de personas haciendo cola delante de un chaflán de El Poblenou o simplemente esperando al sol el turno para que te adjudiquen una de las pocas mesas de este cotizado local. Yo siempre he pensado que, cuando hay mucha gente esperando fuera de un lugar, es que algo mágico esconde (y que también hay poco espacio, obviamente). Can Dendê es uno de esos lugares. De hecho, en nuestra visita nos tocó esperar aproximadamente 1h debido a la gran afluencia y que no se puede reservar.
Brunch delicioso cerca de la playa
Una vez sentados en una de las barras laterales, empezamos a palpar el ambiente de un lugar de tamaño reducido, con la cocina y la barra abiertas para cualquier amante del voyeurismo culinario, con amplios ventanales, luminoso y con una elegante decoración.
Entre su oferta culinaria, destaca una oferta corta pero variada entre huevos de gallina feliz (con especial mención para los huevos Dendê y los Huevos Benedict), sándwiches, hamburguesas y bagels. Además, siempre hay sugerencias del día que completan la suculenta oferta gastronómica. Todo ello bien maridado con sus formidables cocktails a elegir entre Can Dendê Iced Tea, Mimosas, Rossinis, Pink Lemonades o Bloody Marys.
Por si esto no fuera suficiente, Can Dendê posee el toque brasileño de su propietaria que se puede apreciar tanto en el nombre, el “pão de queijo” y en la melodía de fondo.
Huevos Benedict en Can Dendê
Nosotros no podíamos irnos sin probar los Huevos Benedict con salmón ahumado, con una salsa especial propia con un toque de pimentón de la Vera que le da un carácter único. Para culminar el brunch, pedimos el postre “Infancia Feliz”, consistente en una mezcla entre dulce de leche, plátano, galleta casera rota, yogur griego biológico y queso fresco repartido por capas. ¡Una auténtica delicia!
Mi elección para la bebida fue un Can Dendê Iced Tea, consistente en zumo de naranja natural, frutos rojos, té verde y melocotón, con Ron, servido en una preciosa jarra con hielo. Sencillamente, espectacular.
Otros platos que causan furor en Can Dendê son los pancakes con sirope de arce bio, los tomates verdes fritos, el Pulled Pork Sandwich (cerdo braseado a baja temperatura durante 4h, tiras de manzana verde, aros de cebolla y cilantro) o el Pollo Crispy (Pechuga rebozada con Panko, mayonesa, guacamole, sweet chili, cilantro, lechuga y patatas ruffles).
Can Dendê es un lugar especializado en el brunch, aunque también se ofrece como opción para comer durante la semana para los trabajadores de las oficinas del 22@. Lunes y martes ofrece una fórmula con 2 platos + bebida por 11.50€, los miércoles cierra y de jueves a domingo ofrece brunch durante el día.
Que duda cabe que sin duda la comida es uno de los principales incentivos para visitar este lugar, pero no lo es menos la simpatía del servicio. Es cierto que es un local pequeño y a menudo tienen problemas para satisfacer a los impacientes clientes, pero no es menos cierto que la espera es agradable y la cercanía, el entusiasmo y la amabilidad con la que te tratan te hacen olvidar cualquier tipo de contratiempo. Además, es un lugar pet-friendly, así que no deja de ser un punto a favor que puedas llevar a tu mascota mientras disfrutas de un maravilloso brunch.
Can Dendê es un lugar extremadamente recomendable para hacer un brunch cualquier fin de semana, preferiblemente en pareja o con un grupo reducido de amigos (máximo 4), ya que el tamaño del local no permite demasiados comensales al mismo tiempo. Además, en época de buen tiempo puede ser un lugar de paso camino de la playa o después de pasar una mañana en la playa de Bogatell.
La única pega es que no se puede reservar, así que conviene ir pronto o esperar a hacer un brunch tardío, porque de otra manera os tocará esperar bastante.
La relación calidad-precio es fantástica, diría que estándar de un brunch en Barcelona. Los platos cuestan entre 9 y 11€, con una bebida o un café, se puede acabar satisfecho fácilmente con apenas 15€ por cabeza.
Ya sabéis, si nunca habéis pisado El Poblenou para degustar una buena comida, a partir de ahora ya tenéis una buena excusa que bien merece la pena un esfuerzo. Bom apetite!
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